BARRANCO DE LAPAZOSA

Amanece otro día hostil en pirineos...otra vez algo confusos por si mejora o no mejora, para ver que opciones teníamos para hacer. El día anterior habíamos ido a valorar como iba el caudal de Lapazosa y vimos que sí que se podría hacer, pero no podríamos entrar arriesgándonos a que lloviese y subiera el caudal, pero con un poco de suerte, el día se abrió y nos dejó una bonita estampa como esta.

Volvemos a ser el mimso grupete, menos algunos de los granainos que se fueron a hacer la T1- Santa Elena, así que cogimos los trastes y vámonos a patear por un bonito sendero bastante bien marcado, con unas vistas impresionantes.

Cuando llegamos arriba, vimos, por un lado que el barranco iba bastante bien de caudal. Leti era la única del grupo que había hecho el barranco, pero que llevaba mucha menos agua que cuando ella lo hizo. Por otro lado, observamos que el puente de arriba, no estaba, el agua se lo había llevado.

Comimos algo mientras algunos terminaban de ponerse los neoprenos y chismes varios, preparaban mochilas y observaban el paisaje.

Bueno, pues comienza el descenso. Con una pequeña progresión de apenas cinco minutos, llegamos al primer rápel.

Decir que como algunos puntos conflictivos del barranco, había un par de contras que teníamos que estar atentos y que el caudal era considerable, aunque al colmatarse las pozas el peligro era menor.

Había un pasa manos para acceder a su cabecera, por lo que el rápel te sacaba fuera del caño. Aún así, cuando llegabas a la poza, notabas como te costaba "trabajo" salir del agua, pero sin llegar a tener ningún problema ya que la poza no cubría.

El barranco en sí es espectacularmente bonito, de hecho, para mi gusto, de los que hicimos, el que más, además lo cogimos en todo su esplendor de agua. Los rápeles eran divertidos, juguetones... a algunos se nos cambiaba la cara cuando veíamos el chorro, pero lo disfrutamos a tope.

En uno de los rápeles, uno de nosotros bajó a comprobar porque desde arriba, se veía que llevaba un buen caño, y no sabíamos si todos los que íbamos, podríamos bajarlo sin dificultad, así que, efectivamente, a Joaquín le pegó un meneo que bajó al revés, pero no importa, a él le va la marcha¡¡¡




Fue después de este punto donde, algunos más que otros, nos pusimos algo tensos por lo que vimos a continuación. Era un rápel que llevaba muchísima agua, y no sabíamos lo que abajo podríamos encontrarnos. Desde la cabecera no se veía la recepción, porque hacía curva, y además, el que bajaba primero tampoco podía ver al que estaba descendiendo. Aún así, Andrés bajó el primero y, después de dar el aviso de que no había ningún problema, bajamos todos y lo disfrutamos como enanos.

Una vez pasado este punto, supimos que si no había problemas en este rápel, ya todo lo demás sería para aprovecharlo al máximo y para disfrutar de los bonitos rincones que este paisaje nos ofrecía.

En este rápel, en la recepción había un pequeño rebufo, que aunque tocabas pie, podías jugar con el y notar el meneito.

Llegamos al momento de la progresión; estaba divertida, el agua te dejaba disfrutar de cada salto, podías dejarte llevar en algunos momentos e inventarte los toboganes o incluso algún que otro salto.

Y después de esta pequeña progresión no más de diez minutos, llegamos a la gran esperada cascada de 70 metros. Era impresionante cuando te asomabas a la cabecera y veías esa rápel arrampanado, cayéndole el agua por la izquierda, donde al final formaba una especie de Y, tan alto, tus compañeros abajo tan chicos.....increible¡¡

Esta cascada era la guinda del pastel, que tras dos rápeles más, uno de 30 metros y otro de un poco menos, daba por finalizado el descenso..

El rápel de 30 metros también era precioso. Nos costó bastante trabajo recuperar la cuerda, el nudo se quedó empotrado arriba, pero nada que no pudiera solucionarse.

Y último rápel, de uno 12 metros.

Con esta última bajada y una pequeña progresión muy cortita, el descenso finaliza con un día maravilloso, un barranco espectacularmente bonito para el bolsillo, y una compañía inmejorable, como siempre.

Una foto del grupo al completo, en el puente de final del barranco.

Desde aquí quiero mandarle un saludo y un abrazo bien gordote a todos los compañeros que disfrutamos de
este día tan estupendo. Gracias a todos por hacer de este día, uno de esos que te llevas para siempre contigo.

Un saludo a todos los ecedecianos¡¡¡¡ Y nos vemos en la próxima aventura¡¡¡

PARTICIPANTES:

Yoli, de G.E.G
Lobo, Merche del ECDC - Asturias.
Andrés y Leti de ECDC- Madrid
Joaquín, Juanlu, Blas y Mamen del ECDC- Andalucía